Así ha quedado nuestro calendario reciclado.
Utilicé varios envases...
Una rueda vieja...
Y todos los trocitos de lana, cintas y tiras de camiseta que encontré.
Hoy ya tocaba la primera sorpresa:
Objetos desechados, olvidados o en desuso, tienen una segunda oportunidad; cambiando su aspecto y su función, solos o combinados con otros, se convierten en piezas únicas para decorar cualquier ambiente.